Orion se fundó en la ciudad de São Paulo, en un pequeño galpón de la calle Paula Souza, en el barrio de la Luz, donde fabricaba peines de cuerno. Su fundador, un alemán llamado Wild, vendía sus productos de puerta en puerta. Más tarde, la empresa comenzó a fabricar aletas y botones.
En 1903, Orion fue vendida a Paulo Boehme que, en 1905, la trasladó a la calle Joaquim Carlos, en el barrio de Brás. Wild contrató a otro inmigrante alemán, Jorge Griesbach, como su “tenedor de libros”, función que hoy se conoce como contable.
En 1910, Jorge Griesbach adquirió la empresa y trajo a sus cuñados Francisco y Otto Frauendorf que, en 1916, tomaron el control accionario de la empresa.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Orión acogió a muchos inmigrantes alemanes de origen judío, que huyeron de Europa a causa de la persecución. Tuvo un papel relevante en el abastecimiento del mercado con productos escasos durante las dos Guerras Mundiales. Además, sobrevivió y colaboró a aliviar la situación durante la Crisis de 1929 y la Revolución de 1932.
Con su crecimiento, fue decisivo en el suministro de las piezas de caucho necesarias para la implantación de los principales segmentos industriales de Brasil: Automotriz, Siderúrgico, Petroquímico, Nuclear y Aeronáutico.
A principios del Siglo XX, debido a la inexistencia de industrias de máquinas y herramientas, Orion fabricaba sus propias máquinas y herramientas necesarias para la producción de sus piezas. Eso la mantuvo durante muchos años como el mejor parque de fabricación de herramientas del país, lo que fue esencial para acelerar la implantación de la industria automovilística brasileña.
Orion se enorgullece de haber formado grandes colaboradores, entre los cuales, muchos iniciaron sus propias empresas y siguen difundiendo esta semilla. Presentes desde el inicio de la industrialización de Brasil hasta hoy, actuamos con los mismos principios que motivaron a nuestros fundadores e inspiran a las nuevas y futuras generaciones.